Lo decidió la Justicia Federal de Mar del Plata, al condenar con multa y decomisar un inmueble que pertenecía a los hijos de Miguel Save, un ex integrante de la SIDE que compró el terreno con dinero robado a un militante asesinado en 1976. Consideraron que el lavado de activos es un “delito permanente” que se mantiene en el tiempo.
Se trata de una condena de multa y decomiso de un inmueble que pertenecía a los hijos de Miguel Save, un ex integrante de un grupo de la SIDE comandado por Aníbal Gordón, que compró el terreno con dinero robado a un militante asesinado en 1976. El decomiso de los terrenos operará como reparación comunitaria por los delitos de lesa humanidad.
Se trata de una explosión en el comedor de la Policía Federal Argentina que dejó un saldo de 24 muertos. Los jueces lo consideraron una grave violación a los derechos humanos.